Mes: mayo 2008

Álvaro, In memoriam

Hace unos días Álvaro Ballesteros López, alumno de 2º de Cocina de nuestro centro, falleció a causa de un derrame cerebral.

No podía ser otro modo: fue un fallo de su cerebro lo que nos lo arrebató. Su corazón generoso- estamos seguros quienes tuvimos la oportunidad de conocerle- nunca lo traicionó. Siempre disfrutaremos en el recuerdo de su gentileza, amabilidad y buena disposición con los demás.

Su padre, desde la emoción, remite al centro este sentido poema:

A Diego, Ignacio y Toñi
No hay extensión más grande que mi herida

Álvaro, adiós.
Corta faena has podido hacer
en esta vida
truncada por la cornada
traicionera de la muerte.

Estabas en la plenitud del sueño
de los sueños.
Estabas preparando
ese menú cuidado y delicioso
con que los seres humanos
endulzan y adormecen
la penosa rutina de sus días.

Estabas esperando
filetes macerados en vino,
pescadito en adobo;
cortabas zanahorias y pimientos colorados
para decorar el plato de la vida.

Y cortaste también cebollas
intentando apartar los ojos
de la obligada lágrima.

A veces estamos en la vida
como en medio de fogones,
el fuego a punto,
las verduras hirviendo,
aguardando las sartenes…
Y nunca se sabe, finalmente,
cómo saldrá aquello
que hemos preparado
tan amorosamente.

Estamos en la vida
como en la arena de la plaza,
arriesgándolo todo,
con el capote preparado,
con la espada ceñida
con la muleta
hábilmente sostenida…

Pero a veces
la faena más hermosa
se trueca una mala cogida
criminal y certera
que frustra el triunfo final

No habrá ya salida
por esa puerta grande
guardada en vuestros sueños.

Todo se ha ido por esa sola herida:
sueños, esperanzas, ilusiones,
la luz, la sangre, la vida.

La luz que ardía ilusionada,
vital y deslumbrante,
ha quemado de pronto la cera;
ha temblado urgente la llama
consumiendo de un golpe
la energía luminosa de tu vela

¡Ah, maldito toro de la muerte!
¡Ah, maldita guadaña
segadora de vidas!
¡Ah, maldita vena rota
en el centro de tu sueño
y de tu vida!

¡Ah, cebollas cortadas de dolor
que habéis roto de lleno
la fuente de los ojos,
hasta dejarlos secos!

Mas, ahora, todo tú,
deshecho y expandido
habitas un universo nuevo.
Y las partes de tu cuerpo
que no sesgó la herida
estarán vivas, prestando
luz, latido, aire,
y aún más:
salud, esperanza…
y la ternura agradecida
de quienes en tu despojo
han hallado la riqueza increíble
de sonreírle de nuevo
a la vida.

Pero nosotros,
aunque intentemos confortarnos,
estaremos rotos
con el escozor de esta herida.
Y ni siquiera el tiempo
devolverá la tersura a la piel
ni podrá disipar
su cicatriz tan honda.

Álvaro, ¡Adiós!

Paco López de Ahumada – 30 de abril de 2008

Salud Clavero Pulido

Google no es Dios

Os propongo la lectura de un excelente artículo, como es habitual en él, de Javier Martínez Aldanondo. En esta ocasión reflexiona sobre el modo de organizar y facilitar información de Google. Pero lo que le interesa, en realidad, es mostrar que la inteligencia- artificial o humana- no significa acumular información, sino predecir acontecimientos futuros a partir las experiencias previas que registra nuestra memoria, de tal modo que el fallo de la expectativa de nuestras proyecciones es lo que garantiza el aprendizaje.

Google no es Dios- JAVIER MARTÍNEZ ALDANONDO- 8-5-08

En cierta ocasión, mientras preparaba un taller sobre Gestión del Conocimiento, acudí a Google para averiguar el precio de un ejemplar del diario El País. Como hace varios años que no vivo en España (desde la época en que murió nuestra querida Peseta y nació el todopoderoso Euro), he perdido la noción del precio y siendo ya casi de madrugada, tampoco tenía a quien acudir para preguntárselo.

Google no fue capaz de darme una respuesta tan simple como esa, entre otras cosas porque no fue capaz de entender lo que yo le estaba preguntando aunque cualquier niño español lo hubiese hecho sin ningún esfuerzo. Google ni siquiera pudo distinguir si cuando le preguntaba por El País, me refería a un periódico o a una nación. Nunca supo si los resultados que me presentaba me resultaron útiles ni pudo aprender de ello porque he vuelto a hacer la búsqueda hoy mismo obteniendo idéntico resultado. Obviamente Google no sabe leer y por eso no comprende nada de lo qué me está entregando. El verdadero problema es que Google no es inteligente. Si lo fuese, actuaría como lo hacen las personas.

El mérito y el éxito de Google son indiscutibles. En 1998, la empresa no existía y hoy tiene 15.000 empleados, es ejemplo de organización innovadora, aclamada como una de las marcas más reconocidas y por encima de todo, considerada la mejor empresa para trabajar en el mundo. Incluso en el año 2006 se acuñó un nuevo verbo, To Google, en el diccionario inglés. Su buscador ha sido proclamado como una obra maestra y su objetivo resulta loable “organizar la información del mundo y hacerla universalmente accesible y útil”. Sin dudar que esta intención tiene una utilidad innegable, la pregunta que hay que hacerse es ¿Realmente las personas necesitamos todavía más información?.

Permanentemente escuchamos “Si necesitas saber algo, búscalo en Google”. Es frecuente que muchas personas relacionadas no solo con el mundo de la educación o de la formación corporativa sino de los negocios en general, hablen de Google como una importantísima herramienta para aprender “Cualquier pregunta que tengas, Google tendrá una respuesta para ti”. Pero, ¿es así? ¿acaso Google es Dios?

En el mundo en que vivimos, no importa lo que sabes, importa lo que haces con lo que sabes. El sistema educativo sigue insistiendo (al igual que casi toda la sociedad) en que aprender consiste en acumular información lo que equivale a ser culto y por tanto inteligente. La vida te demuestra que eres lo que eres capaz de hacer, es decir, lo que has aprendido a lo largo de tu vida, poco de lo cual se lo debemos a la educación formal. Para nuestra desgracia, la forma cómo Google organiza y entrega información no se parece nada a cómo lo hace nuestro cerebro por que, insisto, mi hijo de 2 años, sin apenas esforzarse, es más inteligente que Google y esto tiene 2 consecuencias cruciales.

1. Nos ayuda a reflexionar sobre qué significa ser inteligente. La definición con la que más me identifico la encontré hace algunos años cuando, interesado sobre cómo funciona el cerebro, leí un magnifico libro llamado On Intelligence. La tesis que sostiene su autor, Jeff Hawkins (fundador de Palm) es que el cerebro de cada persona usa la memoria para crear un modelo del mundo “grabando” todas las experiencias que tenemos. Todo lo que sabes y has aprendido está almacenado en este modelo. El cerebro usa ese modelo basado en la memoria para hacer predicciones continuas de eventos futuros, de lo que espera que experimentemos antes de que lo experimentemos, es decir, de lo que va a ocurrir. La función primordial del cerebro es Predecir. La base de la inteligencia por tanto es la habilidad de hacer predicciones sobre el futuro y la base del aprendizaje es que esas predicciones fallen. El cerebro no inventa respuestas sino que recupera respuestas de la memoria que ya estaban almacenadas hace tiempo y las usa para producir comportamiento y solucionar problemas. Los más de 30 billones de neuronas contienen tu conocimiento, tus habilidades y experiencias, de hecho es tu neocortex el que está leyendo estas líneas. Tú eres tu cerebro. En las sinapsis se almacenan millones de memorias esperando la llamada apropiada, esperando ser invocadas. Cuando las predicciones se cumplen, significa que entendemos y nuestra sensación es que todo ocurre normalmente. Cuando no se cumplen, no entendemos lo que nos obliga a prestar atención y empezar a preguntar.

En varias columnas hemos abordado precisamente esta misma línea de pensamiento que defiende Roger Schank cuando sostiene que para aprender, tienen que fracasar tus expectativas (expectation failure) de lo que va a ocurrir, es decir, tus predicciones no se cumplen y es en ese momento, cuando quieres explicarte el por qué cuando estás dispuesto a aprender. Las personas (al contrario de lo que opina el sistema educativo) NO acumulamos datos sino casos, sobre todo nuestros propios casos. Tener casos conduce a tener expectativas sobre cómo ocurrirán las cosas (cada mañana, espero que salga el sol y amanezca). Somos un conjunto de expectativas que cuando NO se cumplen (no amanece y por tanto se produce un error en la predicción), desencadena un proceso imparable de preguntas para entender y aprender. Esto significa que el aprendizaje surge de la confusión, lo que para mucha gente resulta difícil de aceptar.

2. Las personas no estamos diseñadas para buscar información y cuando lo hacemos, no somos muy hábiles en dicha tarea. Sin embargo, todo el mundo parece extasiado con la capacidad de la web para proveernos de información. No sólo eso, las organizaciones invierten enormes sumas de dinero en sistemas de gestión del conocimiento donde cualquier empleado podrá encontrar toda la información que necesite para su trabajo. De nuevo volvemos a encontrarnos de bruces con la creencia de que lo que necesitan los profesionales para ser más productivos, es más información.

Expertos en el área de las Neurociencias indican que nuestro cerebro sigue siendo un órgano básicamente diseñado para sobrevivir. Esto significa que durante miles de años su función fue prestar atención a los estímulos y señales del entorno para poder actuar en consecuencia. Somos animales cuya atención sigue estando regida por lo emocional. Registramos estímulos (casi siempre inconscientemente) y todo lo que apela a centros emocionales tiene prioridad: Huir, luchar, alimentarse, procrear, etc. Esa es la razón por la que las historias funcionan mejor que las teorías, por la que es más sencillo entender una película que un discurso político, por la que aprendemos naturalmente de nuestras experiencias y no de datos y conceptos abstractos. Si los que leemos este artículo existimos es porque antes que nosotros, muchos seres humanos aprendieron lo necesario para la supervivencia sin siquiera saber leer ni sin que el aula, los cursos o los profesores estuviesen inventados. Los que no fueron capaces de aprender, desaparecieron. De nuevo, aparece el Aprender como la habilidad clave. La supervivencia dependía del conocimiento que transferían los que sabían (los ancianos de la tribu) y la capacidad de aprender de los que se incorporaban (apenas adolescentes). Durante mucho tiempo, los cambios fueron lentos y la cantidad de estímulos limitada. En los últimos siglos, sin embargo esta tendencia ha cambiado velozmente. No olvidemos que la lectura y la escritura tienen apenas pocos siglos en la historia del hombre. La cantidad de información que recibimos a diario es descomunal, sigue creciendo de forma geométrica y por si fuese poco, tenemos siempre la sensación de que nunca es la suficiente. ¿Cuántos mails recibes cada día? ¿Cuántos abres? ¿Cuántos lees? ¿Cuántos contestas? ¿Cuántos guardas? ¿Qué haces con los que guardas? Con otro tipo de documentos pasa exactamente lo mismo. Estamos desbordados, nuestro cerebro no está preparado para absorber tanta información y su forma de defenderse es obvia: se estresa y la demostración palpable la vemos cada día en el trabajo y sus repercusiones sobre la vida familiar.

Lo que realmente ocurre es que nuestro cerebro es un sistema especializado en reconocer problemas y proveernos soluciones. ¿No es esto lo que necesitan las empresas? Cuando necesitamos algo, nuestro cerebro es el que nos trae la información sin que la pidamos. Y esto es así porque esa información ya se encuentra en nuestra cabeza. De hecho, y aunque no nos demos cuenta, cada vez que hacemos algo, cualquier cosa, desde hacernos el desayuno por la mañana hasta lavarnos los dientes antes de dormir, no hacemos otra cosa que gestionar nuestro conocimiento: el cerebro nos entrega continuamente aquellas experiencias almacenadas en la memoria para entender lo que está ocurriendo. Lo maravilloso es que siempre nos llega la información que necesitamos y no cualquier otra Y nos llega justo en el momento que la necesitamos y sin que la tengamos que ir a buscar. La búsqueda que hace Google no se parece en nada porque Google no sabe lo que estás buscando ni para qué y por tanto te arroja miles de entradas donde la pertinencia es aleatoria y donde debes empezar a bucear en cada una de ellas para verificar si responden a lo que estás buscando. Es esencial la manera en que almacenamos esas experiencias (lo que abordaremos en otra columna) y como accedemos a ellas. Por si fuera poco, el conocimiento es dependiente del contexto ¿Qué sabe Google de mi contexto? Para aprender, dependemos de lo que ya sabemos.

Quienes trabajan ya sobre la Web 3.0 se preguntan si seguiremos buscando información o lo harán las máquinas por nosotros. Para que esto sea así, un computador (que hoy no se parece mucho a un cerebro) necesita ser inteligente y copiar la forma en que operan las personas … Estas distinciones son cruciales ya que según lo que creamos que significa ser inteligente y cómo aprende la gente, diseñaremos la correspondiente oferta de recursos y herramientas para ayudarles a hacer mejor su trabajo y obtendremos o no determinados resultados.

En varias ocasiones, algunos lectores que me han comentado que mis artículos del newsletter son demasiado largos. Es verdad y mi respuesta es siempre la misma: Vivimos sometidos a la tiranía de la instantaneidad, a la dictadura de la velocidad. Nunca tenemos tiempo, todo es para mañana mismo, cada vez más buscamos simplificarlo todo (cursos más cortos, libros más escuetos, dietas más inmediatas…). Y ocurre que hay ámbitos donde los atajos no funcionan y uno de ellos es en lo relacionado con el conocimiento, el aprendizaje y la inteligencia. Lo que te ha costado 30 años de tu vida aprenderlo no se puede aprender en 2, ni en 5 ni en 10. Google, un libro o un sistema de buenas prácticas son una pérdida de tiempo si no los llevas a la práctica. No basta con leer o escuchar, de hecho, nada funciona mientras no lo practicas.

Es indiscutible que la variable tiempo es la clave en los negocios de hoy. Te pagan por tu tiempo y aunque se trate de un bien escaso (el tiempo es oro) está uniformemente repartido porque todos tenemos la misma cantidad para gastar. Ya no importa donde estés, importa que estés (aunque sea virtualmente) cuando ocurran las cosas. Las organizaciones e incluso las personas, trabajan con información en tiempo real para tomar decisiones en tiempo real, es decir, se gestionan en tiempo real. Para ello, es imprescindible que el aprendizaje ocurra en Tiempo Real. Pero para aprender de verdad, hay que tomarse tiempo, hay que equivocarse mucho pero sobre todo, y perdonen mi obsesión, hay que practicar repetidamente (no aprendo hasta que no hago algo con lo que me entregue Google, pero no antes). La herramienta cerebral que permite que se formen esas sinapsis (sustento de nuestras predicciones), es la práctica repetida, reiterada, continua. Aprender es enemigo de las prisas, de la cultura Light. Si no estamos dispuestos a tomarnos ese tiempo, entonces es que no estamos dispuestos a hacer las cosas con cariño, con pasión y como decía un antológico refrán español (Vísteme despacio que tengo prisa) con sabiduría. Google puede ser un primer paso en un proceso de aprendizaje, nunca el último. ¿Te sirvió Google cuando aprendiste a andar en bicicleta? ¿Qué crees que hace tú cerebro cuando pedaleas sobre tu bicicleta?

Semana Cultural de Hostelería y Turismo

El Departamento de Hostelería y Turismo organizó, un año más, las “jornadas de actualización” dirigidas a los alumnos del centro, englobadas dentro de la Semana Cultural que se celebró entre los días 21 y 25 de abril.

El objetivo de estas actividades es acercar a los empresarios del sector a nuestras aulas, haciéndoles partícipes de la formación del alumnado, ofreciendo una perspectiva del mundo laboral basada en sus experiencias diarias. Pero también pretendemos que se conozca nuestro centro y el grado de formación de nuestros alumnos, favoreciendo de esta forma su inserción laboral.

Ahora toca hacer balance y creemos que el resultado ha sido muy positivo. No sólo por la participación de estos profesionales, sino también por el interés con el que la mayoría del alumnado ha acogido cada una de las actividades propuestas.

Desde aquí queremos dar las gracias a todos los conferenciantes, entre los que se encontraban varios compañeros del departamento, pero debo decir que estamos especialmente orgullosos de nuestros alumnos, tanto de los que se marcharon como de los que aún permanecen en el centro y que han colaborado en estas jornadas.

Cuando un alumno termina sus estudios, nos queda su recuerdo y su foto en la orla, cuando un alumno nos deja repentinamente nos queda su recuerdo doloroso pero que nunca desaparecerá. Álvaro siempre estará en el I.E.S. Gran Capitán.

Toñi Fernández Méndez

Para ver la fotografías, haz click aquí

Finalistas en el II Premio Espiral edublogs ’08

Después de anunciar la participación en el II premio Espiral, nos satisface comunicar que hemos quedado finalistas con dos de nuestros blogs:

El próximo jueves 15 de mayo se fallarán los premios de este II Premio Espiral edublogs. Según las bases del mismo, este premio pretende:

  • Valorar la importancia y repercusión de los blogs en la educación, como herramienta didáctica para el desarrollo de contenidos curriculares y motivación de los alumnos.
  • Reconocer el trabajo de muchos profesores y profesoras en la red demostrando su utilidad pedagógica.
  • Servir de escaparate motivador de una corriente educativa dentro de la blogosfera, que ayuda a la generalización del uso de las TIC en el aula.
  • Favorecer cauces de opinión y debate sobre la necesidad de avanzar en el uso de los blogs en el entorno educativo.

Aspiraciones y sueños plasmados en madera

El periódico «El Día de Córdoba» dedica una página a la Semana de la madera celebrada recientemente.

Una muestra reúne el trabajo de los alumnos del Programa de Garantía Social de ebanistería del instituto Gran Capitánl formación La muestra reúne el trabajo de los 18 alumnos del Programa de Garantía Social de auxiliar de carpintería.

Inauguración de la Semana de la Madera

Quedó ayer inaurada la exposición anual de esta especialidad, que viene celebrándose tradicionalmente en el IES «Gran Capitán». Asistieron, como podéis ver en las fotografías las siguientes autoridades: Dña. Araceli Carrillo, parlamentaria andaluza; Dña. Mª Dolores Salinas, delegada provincial de Educación; D. Francisco Gomera, jefe del Servicio de Inspección; Dña. Julia López, responsable de necesidades educativas especiales de la Delegación Provincial, y D. José Luis Millán Escobar, inspector de referencia de nuestro centro.

Presentación del libro «La colección Dolores Belmonte»

Nuestro compañero Federico Abad tiene el placer de invitarnos a la presentación de su nuevo libro La colección Dolores Belmonte -Estudio sobre un cancionero infantil de la Andalucía oriental- editado por el Centro de Documentación Musical de Andalucía.

Colección Dolores Belmonte

La presentación tendrá lugar el próximo viernes 9 de mayo de 2008, a las 20 horas, en el salón de actos de la Delegación Provincial de Cultura de la Junta de Andalucía en Córdoba (calle Capitulares, 2).

Contaremos con la presencia de:

  • Dolores María Belmonte, recopiladora del repertorio y especialista en literatura de tradición oral.
  • Rafael Montilla, colaborador en la documentación de fuentes bibliográficas de la obra, que hará una breve disertación sobre la recopilación de la tradición cancional infantil en España desde el Siglo de Oro a nuestros días.
  • Coro del Conservatorio Superior de Música Rafael Orozco de Córdoba, dirigido por Dorcas Collado, que interpretará dos versiones armonizadas para cuatro voces de sendas canciones recogidas en la obra.

Matías Regodón nos comenta el libro en su Rinconete.

9 de mayo: Día de Europa

Desde el DACE, Mª Dolores y Salud nos proponen, para celebrar el día de Europa una serie de actividades interactivas, que consideramos son interesantes y os pueden ayudar a conocerla:

Aula de verano «Ortega y Gasset»

La revista Consumer nos informa de la convocatoria de un programa de becas (100) de la Secretaría de Estado de Universidades del Ministerio de Educación y Ciencia, que denomina Aula de verano «Ortega y Gasset». Las características de este programa son las siguientes:

  • Destinatarios: alumnos que finalicen en este curso sus estudios de bachillerato o ciclos formativos de grado superior.
  • Finalidad: introducir a los mejores alumnos de Secundaria en el mundo universitario.
  • Duración: una semana. Lugar y fechas de celebración: Santander, Palacio de la Magdalena; del 16 al 22 de agosto o bien del 23 al 29 de agosto.
  • Fecha de presentación de solicitudes: antes del 20 de junio, los alumnos de bachillerato; antes del 27 de junio, los alumnos de ciclos formativos.
  • Requisitos: nota media en su expediente académico igual o superior a 9,30 puntos.
  • Cuantía: gastos de alojamiento y manutención cubiertos; gastos de desplazamiento, hasta 200 euros.

Los trámites que debéis cumplir los interesados son muy simples:

  1. Cumplimentar una solicitud.
  2. Certificado académico expedido por el centro.
  3. Fotocopia del DNI.
  4. Autorización de los padres para los menores de edad.

En fin, todos aquellos que cumpláis los requisitos y queráis pasar una semana este verano en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Santander, no dejéis pasar esta oportunidad. Estoy seguro de que disfrutaréis de esta experiencia. A todos:

¡Ánimo y suerte!